La era en que vivimos anuncia conflictos gigantes.
Era una constante histórica, después de la experiencia de las guerras, lo que
afirmaba De Gaulle: “El orden militar está juzgado en su raíz”, lo cual
contrasta con la idealización de la paz.
La reivindicación del derecho a la paz no ha
sustraído a los países de la necesidad de disponer de la organización militar
antes y durante los conflictos. Tenemos que distinguir cuidadosamente los
problemas, a fin de comprender como una nación pacifista por instinto de
conservación mas que por tradición, está constreñida a perfeccionar sus
instituciones militares.
Este planteamiento debe recordarnos que el origen
del derecho administrativo se remonta cómo reprimir la violencia, y el
resultado era la seguridad pública. La lucha contra las epidemias o la
protección contra el fuego para luego pasar a la protección de las rebeliones
armadas o la protección de la propiedad, le daba un sentido amplio a la función
de policía. El orden público era la paz del buen ciudadano y la manera de
lograrlo combinaba protección y seguridad política, la cual como policía
política, en Francia, se consideraba la vía para garantizar la estabilidad del
Estado.
¿Cómo organizar una Nación en armas durante la
Paz? Militares profesionales y desconfianza en toda forma de milicia, produce
que el Gobierno desarrolle fuerzas de intervención especializadas para casos de
agitación social y política, pero jamás valerse de la violencia para permanecer
en el poder.
Por eso es que en países de tradiciones
igualitarias, como Francia, las transformaciones sociales de gran magnitud
conllevan pasiones y desórdenes. Por eso la evolución administrativa se
manifiesta como un doble movimiento que tiende a modernizar las instituciones
de sus mecanismos tradicionales, y por otra parte establecer vínculos con los
poderes sociales que rivalizan con el Estado.
Aquí en Venezuela, no podemos explicar que el
Estado sea incapaz de garantizar la vida, como tampoco pueda proteger sus bienes
frente a situaciones que constituyan amenaza, y el gobierno actúe como una
amenaza ante la propiedad privada.
Ningún ciudadano obtiene una explicación,
salvo echarle la culpa a otro. Pareciera que llegó la hora de ejercer la
soberanía indirecta, esa que es intransferible y que reside en el pueblo, para
que mediante el ejercicio del sufragio cambiemos de mando y conducción del
Estado y salvemos primero que nada la vida de las manos del hampa y la
corrupción.

Nunca olvidaré que fue usted quien redactó la sentencia que le permitió al difunto convocar una asamblea constituyente. Usted torció la interpretación de la ley con aquello de "el poder originario del pueblo". Usted es cómplice y co-rresponsable de la tragedia venezolana. Usted pudo haberlo impedido y lo que hizo fue facilitarlo. ¿Y qué hizo usted después? Se contentó con hacerse la ofuscada largándose al mejor estilo opereta de la Asamblea Nacional, como si eso fuera a consternar a los rojos.
ResponderEliminarA mis ojos, usted no tiene NINGUNA autoridad moral para emitir ninguna opinión. Sus palabras tiene el valor de las heces.
COINCIDO CON ANONIMO AL DESTACAR LA RESPONSABILIDAD DE CECILIA SOSA, ESE DIA DE LA SENTENCIA ESTABA EN LA PLAYA CON MI FAMILIA -DE 6 PERSONAS-, HOY MI MADRE, MI HERMANA Y MI SUEGRO HAN FALLECIDO. RECUERDO QUE ESE DISCUTIMOS LAS IMPLICACIONES DE LO QUE HABIA HECHO CECILIA SOSA, ALLI COMENZARON LAS DIFICULTADES DEL PAIS, EL DERRUMBE DE LAS INSTITUCIONES PARA CONSTRUIR ESTA PESADILLA QUE NOS ENVUELVE. NO LO DEBEMOS OLVIDAR TU RESPONSABILIDAD CECILIA SOSA!!
EliminarLa vida y las épocas son muy cambiantes, los ideales de desarrollo social son progresistas por lo tanto arriesgados al tomar las decisiones que pueden cambiar la vida de los ciudadanos de un Estado, sobre todo para sopesarlo equilibridamente. Si vemos el derecho constitucional como base de la balanza entre la administración y los administrados, unos de los grandes problemas que dieron origen a la situación de caos que vive actualmente Venezuela, no fue el "poder originario", sino mas bien la somera linea que divide la separación de poderes.
ResponderEliminarDe allí, no es tanto considerar a una persona como una autoridad moral por una actuación que realizó en un momento especificó, sino mas bien observar los cambios que alcanzó al reflexionar sobre situaciones que se dieron a lugar al desequilibrio de la balanza.
Como bien lo afirmó la Doctora, no es culpar a otras personas, sino mas bien actuar en base al derecho al voto con el objeto aligerar los vicios del presente Gobierno de turno, por lo tanto, esas palabras si tiene un gran valor.
tampoco se olvida cuando usted como presidenta del TSJ, abandono el congreso en pleno discurso de Jorge olavarria cuando le canto las verdades a Chavez, esas verdades que usted comentan suenan a bofetadas en la cara de todo el pueblo venezolano. deje el cinismo y guarde silencio, por dios, respete al pueblo, no se puede olvidar.,
ResponderEliminarUsted da nauseas a todo democrata.
ResponderEliminarHoy 16/04/13 surge la pregunta ¿que hacer frente a este nuevo escenario, en el cual fue solicitado públicamente un recuento del 100% de los votos y el mismo fue negado por la presidente del CNE en cadena nacional; se ha planteado una impugnación del proceso electoral del 14/4/13, pero también se habla de la quema de los documentos electorales (urnas, boletos, cuadernos electorales, actas, etc.)? ¿Cual es la situación legal en la cual nos encontramos los ciudadanos venezolanos ante estos hechos?
ResponderEliminarCECILIA COMO VES LOS VENEZOLANOS NO OLVIDAMOS, EN ESTE PAIS HAY LIBERTAD DE EXPRESION PERO UD. DEBE RECONSIDERAR PUBLICAR EN LAS REDES SOCIALES SUS FALACIAS. CALLESE UN POQUITO, GUARDE LA COMPOSTURA, EXPRESESE EN PRIVADO O RECIBIRA LOS TORTASOS QUE SE MERECE. NINGUNA REFLEXION QUE HAGAS AHORA PUEDE COMPENSAR LO QUE NOS HIZO, UD, SERA JUZGADA EN ESTA VIDA POR SU CONTRIBUCION A ESTA PESADILLA. UD. DA VERGUENZA.
ResponderEliminarNunca olvidaré que fue usted quien redactó la sentencia que le permitió al difunto convocar una asamblea constituyente. Usted torció la interpretación de la ley con aquello de "el poder originario del pueblo". Usted es cómplice y co-rresponsable de la tragedia venezolana. Usted pudo haberlo impedido y lo que hizo fue facilitarlo. ¿Y qué hizo usted después? Se contentó con hacerse la ofuscada largándose al mejor estilo opereta de la Asamblea Nacional, como si eso fuera a consternar a los rojos.
ResponderEliminarA mis ojos, usted no tiene NINGUNA autoridad moral para emitir ninguna opinión. Sus palabras tiene el valor de las heces.